(Foto ©Chico Sánchez -Derechos Reservados) |
Lo más curioso de este perrito es que todos los días se coloca frente a la puerta principal del santuario y espera a que llegue Patricia Ruíz, la fundadora. Siempre se coloca en un lugar visible cerca de la entrada para asegurarse de que Patricia lo vea cuando entre y poder saludarla. El no puede ver ni oir pero puede asegurarse de que lo vean. Una gran lección para aprender a aprovechar lo que sí se tiene y no perderse en lamentarse por lo que se pierde.
Además de poder adoptar o apadrinar a Ron Pope puedes ayudar a los habitantes del santuario haciendo una donación. También puedes pasar a visitar a estos perros que siempre se alegran mucho de que lleguen personas con las que poder jugar.
Para más información sobre este santuario entra a www.milagroscaninos.org
Puedes ver un audiovisual sobre este santuario a continuación.